Jugaba con sus perfectos rizos mientras él estaba encima de mi completamente desnudo, besándome.
Harry: ¿Estás segura de que quieres...?-dijo deshaciendo nuestro apasionado beso-
Tú: Mientras no nos escuchen...-dije tímida-
Harry: Vamos a mi habitación, tiene pestillo-dijo haciendo un esfuerzo para levantarse-
Cogió la toalla que estaba tirada delante de la puerta de mi habitación, se la volvió a colocar rápidamente, y nos dirigimos hacia su habitación, cuando ya estábamos dentro echó el pestillo y se acercó lentamente a mi con una mirada pervertida y su media sonrisa dibujada en su perfecta cara. Me volví a deshacer de su toalla, y él se deshizo lentamente de el pijama que me cubría, le acariciaba lentamente su torso sin dejar de besarnos, ya solo me cubría mi ropa interior, la cual se deshizo rápido, llegamos a duras penas a la cama, ya completamente desnudos, mordí levemente el labio inferior de Harry, impaciente, él me respondió con un pequeño gruñido.
Deshizo un poco nuestro salvaje beso para estirar su brazo y de su primer cajón sacar un condón, lo abrió con los dientes sin dejar de mirarme, y rápidamente se lo puso, volviendo a su posición anterior, entre mis piernas, me miró para recibir mi aprobación para empezar nuestro amor, yo solo asentí suavemente, y él empezó despacio, como si fuera nuestra primera vez, pasé mis brazos por su nuca, llegando con mis manos hasta mi espalda y acariciándola suavemente, nos besábamos suave y apasionadamente, mientras él acariciaba rincones de mi cuerpo que yo aun desconocía.
Y juntos, gritamos nuestros nombres alcanzando el Olimpo.
Nos quedamos abrazados durante unos instantes, hasta que el estómago de Harry rugió, soltamos una risita y nos vestimos para bajar a cenar.
Bajamos entre risas y algún que otro beso, y al llegar al salón todas las miradas se posaron en nosotros.
Tú: ¿Q-qué?-pregunté tímida con miedo a que nos hayan escuchado-
Louis: Así que haciéndonos sobrinos ¿eh?-dijo con una risa pervertida y los demás estallaron a carcajadas-
Liam: ¿Habréis usado protección no?- preguntó nuestro siempre daddy directiones preocupado- sois muy jóvenes y es mejor no haces locuras...
Tú: Li, Li, claro que hemos usado protección-dije calmándolo- relájate.
Niall: Es mejor que comáis algo rápido, es muy tarde, y mañana tenemos que madrugar mucho-dijo mientras jugaba con la melena de Bego-
Tú: Claro, duende-reí-
Nos dirigimos Harry y yo fuimos a la cocina a comer algo de la cena, que debe de estar ya helada, serví un plato para Harry y otro para mi y los metí en el microondas para que se calentaran un poco.
Harry: ¿Vendrás a nuestros conciertos?-preguntó sonriendo-
Tú: Pues claro, no me perderé ninguno-le abracé- eres tonto si pensabas que no iba ha ir a veros-nuestros labios iban acortando la distancia que quedaba entre ellos, podía sentir su respiración acompasada con la mía, nos estábamos rozando, justo cuando el maldito pitido del microondas nos hace dar un brinco por el susto-
Harry: ¡Máquina del demonio fabricada para estropear momentos!-reí ante sus palabras-
Nos pusimos a comer en silencio, regalándonos sonrisas y miradas. Terminamos de cenar, y los chicos vinieron a invadir nuestro espacio.
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Siento escribir tan poco, pero no tengo mucho tiempo, perdón D:
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